sábado, 28 de diciembre de 2013

por Zai

Como en una pesadilla, imagino ese gesto tuyo que odio, ese que odio en cualquier persona que lo haga. Y recuerdo tu lengua estirada tratando de lamer todo el labio superior, recorrerlo como borrando marcas de Yogourt, y queda tu boca mojada de saliva como si te diera placer esa humedad. Desde acá logro sentir ese olor y hago unos pasos atrás. Frigida? Porque no me gusta que haya olor a saliva en una parte del cuerpo que no la segrega?
La mímica es una reacción natural de la gente buscando empatía o a veces una respuesta del cuerpo inconsciente inmediata y obediente a las órdenes que emite otro, por eso es que cada vez que cuento esto la gente a mi alrededor no puede evitar empezar a relamerse los labios para tener la sensación en el cuerpo para probarse a si mismos que pueden reproducir el movimiento, de repente todos sacan las lenguas como si hubiese lluvia de yogourt o jugo recorriéndoles la cara, como si fueran bebés gigantescos dispuestos ahí para torturame con ese gesto odioso que se reproduce sin parar como conejos enamorados. Y no es que no me guste el amor o los conejos.
Es que no hay una receta para esto. No estoy siendo dramática, a vos te encanta decir esa palabra. De igual manera antes de pasar a considerar mis defectos que al parecer ahora tengo muchos, y no, no estoy exagerando, ¿soy exagerada ahora también?
No estoy poniendo excusas, pasa que ahora las cosas que antes me habían parecido arbitarias, como lo de la lengua, o el disco que me grabaste con una canción de Posca. (No sé si me gustan tanto los conejos ahora que lo pienso, tienen el cuerpo raro) No estoy vuelteando, vos sabes que siempre fui muy clara, no , yo no “Creo” que soy clara, yo soy clara.
Pasa que traté de empezar a escribir esto con el lápiz que me regalaste (ese super cool de la papelería de Palermo) y no podía porque la punta estaba rota, yo no tengo sacapuntas compre un monton pero los usas una vez y los tenes que tirar, no, no es una analogía de lo que me pasa con vos(lo del sacapuntas al menos). Lo del lápiz es un claro simbolismo de nuestra incompatibilidad, y ya sabemos que vos sos un signo de aire y yo de agua, y lo de Posca y los conejos y DEJÁ- DEJÁ- DE RELAMERTE LA CARA.

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